No he podido volver a trabajar en la asociación en la que solía dar manualidades a personas mayores. Con el confinamiento, se cancelaron a principio de este año las clases y cuando se retomaron, me fue imposible debido a la carga de trabajo que tuve en los colegios y en la academia.
Este fue uno de los trabajos que aproveché para hacer en casa. Se me ocurrió realizar esta bonita manualidad que sirve para acomodar cosas en mi escritorio. La uso principalmente para poner los pinceles y otros utensilios que utilizo a diario. Me gustó muchísimo el acabado y se me hace muy hermoso.